jueves, 1 de julio de 2010

Gustos arquitectónicos: Los deportes de los arquitectos.

La valoración de obras arquitectónicas como feas resulta ser un deporte entre los arquitectos. Para jugar se necesitan formar dos equipos de tres, cuatro, cinco o más arquitectos que den proyectos. Se ubica la zona en donde se encuentre un edificio cuyo arquitecto de preferencia sea desconocido. Por ejemplo, puede ser la iglesia que se encuentre en la zona de estudio en donde se piensa realizar el ejercicio de proyectos del próximo semestre. Se anota el primer punto quien logra emitir el juicio de “está re-fea”, “es estilo neocolonial” o “no es moderna”. Con ello se logra madrugar al equipo contrario que tendrá derecho a preguntar porque que esa obra “está re-fea”. Si la respuesta es: “porque está re-fea”, entonces, este equipo suma puntos. El equipo que preguntó espera su turno y puede contraatacar dando diferentes argumentos como que la opinión del profesor que dice que esa obra “está re-fea” resulta irrelevante porque para el arquitecto que la proyectó y para los clientes que contrataron al arquitecto muy probablemente les parece hermosa; que hasta donde alcanza el entendimiento no hay casos registrados de arquitectos que propongan proyectos que busquen ser feos de principio, etc., entonces empieza a sumar puntos. Si la respuesta del otro equipo es que los arquitectos no se proponen hacer edificios feos sino que les salen feos, se anota cinco puntos. Si el otro equipo revira y establece que “los edificios no resultan feos en si”, sino que “los edificios nos parecen feos”, sigue sumando… Así el juego continúa hasta que uno de los dos equipos acumule más puntos. En caso de empate o que ninguno ceda en sus argumentos, entonces, se pasa a una consulta. Se convoca a los lectores, de algún blog serio y exclusivo como este (hasta el momento con cinco asiduos y entusiastas bloguistas) a que expongan que les parece la iglesia representada en la imagen de abajo. Se les pregunta: ¿Es fea la iglesia? En caso de ser una respuesta afirmativa se les pide que digan: ¿Por qué es fea?.


Lo anterior no permite desempatar el juego, sirve de indicador para saber quien tira la primera piedra y esconde la mano.


A. di Valdeterra

1 comentario:

  1. La iglesia es muy rara, con eso de los célibes paidófilos, pero canastas dominicales llenas...ahora que si nos referimos a laimagen del templo ilustrado en este post, pues doy mi voto a favor del no. Porque incluso lo grotesco se remonta a los grottos (grutas), y su configuración irregular, obscura e intimidante...y esto no le llega a tal comparativo. Bajo esta idea, ¡Qué alivio!, se han salvado todas las obras de "arquis"...(LOL)

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